Me han reprochado no ocuparme de Obama. Deduzco que echan en falta alguna reflexión sobre política internacional, desde las perspectivas de raza y género.
Ahí va:
Que una MUJER se transforme repentinamente en la cabeza visible del Ku Klux Klan: no es, e insisto, ¡NO ES! UNA BUENA NOTICIA PARA LOS NEGROS.
Lo será, si acaso, para las feministas.
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